jueves, 23 de diciembre de 2010

Gracias CRACK

Se nos ha ido uno de esos jugadores que con el paso de las temporadas se le cogía cariño por su personalidad y compromiso por el club al que defiende semana tras semana. Ese jugador es Simao Sabrosa, que después de tres temporadas y media en el Atlético de Madrid se despide de una de las etapas mas importantes de su vida, como decía hoy en rueda de prensa, para comenzar una última travesía en Turquia en el Besiktas donde compartirá vestuario con Guti, Quaresma y Fernandes entre otros jugadores. 
Simao posando en el día de su despedida
Mientras escribo estas lineas se me hace difícil asimilar que este pequeño jugador portugués deje el equipo colchonero, y eso se debe a la gran aportación que ha dado durante estas temporadas, las cuales siempre han estado colapsadas en todos los encuentros por el juego y goles que hacían el Kun Agüero y Diego Forlan, pero que sin un referente como Simao hubiera sido mas complicado que ambos jugadores hubieran mantenido los registros que han conseguido junto al jugador portugués. 
El extremo izquierdo del club colchonero se especializaba por el gran desborde en bandas, sus precisos centros al área y sobre todo el sacrificio que ofrecía hacia el equipo, ya que siempre se dedicaba a abrir espacios entre las defensas rivales para hacer así mas fácil el juego a los delanteros rojiblancos a la hora de buscar desmarcarques en el área de los equipos rivales. 
Esta temporada se le notaba que estaba en un grandísimo estado de forma, gracias en gran parte a su marcha de la selección portuguesa, donde sus números iban encaminados a ser los mas destacados de todas sus temporadas en las que ha estado en el Atlético de Madrid, llevando en 23 partidos cinco goles y una gran suma de asistencias como las que dio a su compañero Tiago el pasado domingo que supuso los dos goles del jugador luso. Este año disfrutaba mas que nunca del extremo portugués por su determinación en el juego del equipo y porque en todos los partidos estaba presente y nunca se escondía fuera cual fuera el resultado y el juego del equipo.
Se dice que era un capitán respetado y comprometido por el equipo, hasta tal punto que su salida tiene que ver también por ayudar económicamente al club, el cual recibirá una suma importante de dinero por un jugador que culminaba su contrato el próximo mes de Junio y cuya renovación iba a ser a la baja debido a su edad.
De esa manera ambas partes se ven beneficiadas económicamente, aunque los que no se beneficiaran serán los aficionados atléticos, ya que jugadores tan comprometidos con el club y que sudan la camiseta domingo tras domingo no se ven tan a menudo en el estadio Vicente Calderón, por eso diría yo que esta despedida se asemeja mucho a la marcha hace unos años de Fernando Torres, porque son jugadores con los que la parroquia rojiblanca se identifica en el  
Simao celebrando su último gol como
rojiblanco
aspecto emocional a la hora de defender los colores rojo y blanco. Solo me queda desearle mucha suerte y que seguiré luciendo la camiseta con el numero 20 en la espalda con la que tantos éxitos he disfrutado los últimos meses gracias a el. Hasta siempre “Sabroson”

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